NÚMERO: 88TÍTULO: OTRA VEZ EL PASADO
SINOPSIS: La expropiación de tierras para la construcción de la línea de ferrocarril abona el terreno para que se produzcan abusos frente a los pequeños propietarios de parcelas. Incluso a los más poderosos como don César tratarán de arrebatarles con malas artes los terrenos a fin de robarles ese terreno. El Coyote se verá en la necesidad de actuar.
PERSONAJES:
+: César de Echagüe, César de Echagüe Acevedo.
+: César de Echagüe, César de Echagüe Acevedo.
-: Eric Mac
Graw, Bowee.
FRASE:
- La completa libertad sólo puede interesar y resultar beneficiosa para quien sabe valerse de ella.
CITAS:
- El fin justifica los medios.
- La cabra tira al monte.
- Toda fortaleza tiene algún punto débil.
- Buena sombra cobija a quien a buen árbol se arrima.
VALORACION: 9
OPINIÓN: Una de las novelas más dinámicas y entretenidas de las leídas hasta ahora. Y eso que el Coyote prácticamente no ha actuado. Interesa ver a lo que se puede llegar cuando existen grandes intereses económicos y cómo actúa don César.
CAPÍTULOS:
1. Las alegrías de don César.
Don César atiende a dos peones
suyos, Tobías Salgado y Elena Jubera, que pretenden casarse en breve. Para su
futuro consiguen que don César les regale un pedazo de tierra. Posteriormente
don César le comenta a su hijo que van a ir al vale de San Lorenzo donde se
prevén tiempos convulsos debido al tendido del ferrocarril.
2. T.A.&C.R.
La T.A.&C.R. es una compañía
ferroviaria que pasa por los Estados de Texas, Arizona y California. En
California tienen que pasar por el valle de San Lorenzo, por lo que estiman que
mientras que en los Estados de Texas y Arizona el tendido ha supuesto un
desembolso reducido de dinero, al pasar por tierras desiertas y en su mayoría estatal,
en el valle de San Lorenzo pasarán por terrenos que pertenecen a muchos
pequeños propietarios, por lo que una negociación con cada uno de ellos puede
disparar el precio de la compra de terrenos. El Consejo de la compañía está
compuesto por los viejos coroneles Lionel Wilcox y Trace Farrish y diversos
representantes de las entidades financieras. En esta reunión, en el mismo tren,
el ingeniero Eric Mac Graw propone conseguir que los terrenos del valle de San
Lorenzo por un importe muy inferior utilizado métodos más enérgicos contra los
pequeños propietarios de los terrenos. Farrish se opone, pero se encuentra con
que los demás consejeros, e incluso su hijo Quincy apoyan a Eric, por lo que lo
apartan temporalmente de la dirección de la compañía.
3.- Un testigo involuntario.
César de Echagüe y Acevedo se el
valle cuando se encuentra con una laguna en la que decide darse un chapuzón,
cuando para un tren cerca y se apean algunos pasajeros que se dirigen hacia la
laguna. César se esconde entre la vegetación escuchando los planes que Mac Graw
y Bowee tienen para el valle de San Lorenzo.
4.- Forasteros en el valle.
Tobías y Elena se encuentran en sus
nuevas tierras cuando reciben la visita de los señores del ferrocarril, quienes
le comunican que debe de vender sus tierras por 50 $.
5.- Los consejos de don César.
Don César recibe la visita de Tobías
quien le explica lo ocurrido. La oferta es correcta al haber escriturado los
terrenos por un valor inferior al real para evitar pagar impuestos. Don César
le aconseja que le siga la corriente a la compañía de ferrocarril pero que no
venda.
6.- Una visita muy amable.
Don César atiende a Mac Graw y Bowee
que han ido a hacerle una oferta por las tierras que necesitan para el tendido.
Llegan a un acuerdo en cuanto al precio pero le piden a don César que vaya a
cobrarlo a Farrish City, a lo que accede. Al salir de la hacienda Mac Graw y
Bowee hablan entre ellos acerca de la aparente estupidez del hacendado y se sus
planes de engañarle y matarle. A la vuelta hacia Farrish City, Mac Graw
comprueba que Tobías se niega a vender sus tierras, por lo que los hombres de
Eric le asustan realizando disparos sobre su casa, matando incluso a su vaca.
Tobías, enfadado, se dirige hacia Farrish City.
7.- La furia de los hombres mansos.
Tobías mata en Farrish City a tres
trabajadores del tendido cuando es detenido. Con dificultad evitan que se
produzca un linchamiento, aunque pronto será juzgado y condenado. Justo en ese momento
lega don César con su hijo.
8.- En alas de la muerte.
Bowee
trata de engañar y matar a don César tras formalizarse la venta de los
terrenos. Allí se encuentran reunido Bowee y Gullic (otro consejero molesto
para sus compañeros) firmando el contrato de venta y entregándole el terreno.
En un descuido Bowee le cambia el maletín del dinero y abandona el vagón.
Precitan el vagón por una pendiente hacia un barranco. Don César hace como que
todo es una broma y finalmente las vías han sido preparadas para desviar el vagón
hacia un llano que frena el tren, ante los atónitos ojos de los que planeaban
el asesinato del hacendado. A Bowee, alguien le ha quitado el contrato y el
dinero. Don César sigue simulando que todo es una broma y se va de la ciudad.
Los demás discuten por lo ocurrido y en medio de la pelea matan a Gullic.
Finalmente llega u n aviso del Coyote.
APORTACION ADICIONAL:
El Valle de San Lorenzo
Mi primera curiosidad era saber si existen el Valle de San Lorenzo y las ciudades de Farrish City y Wilcox City, en California. En cuanto a las ciudades, no he podido comprobar que existan (en Arizona sí que existe City of Willcox, pero se fundó en 1915, posterior a los hechos que discurren en la novela).
El Valle de San Lorenzo sí existe y su
localización es la siguiente:
Dificultades del tendido ferroviario
La novela trata de las dificultades
para la construcción del tendido ferroviario en el Viejo Oeste. Unos párrafos
que transcribo de un libro que reseño hacen referencia a este esfuerzo que
tuvieron que realizar:
“Pocas veces una empresa humana ha
afrontado más dificultades y peligrosos obstáculos naturales que la asumida por
los topógrafos, los ingenieros y las brigadas de trabajo del ferrocarril
transcontinental estadounidense. La labor era durísima: de sol a sol, lo mismo
cuando se trabajaba en desiertos abrasados por el calor como cuando tocaba bajo
un frío glacial, retirar toneladas de nieve antes de colocar los durmientes,
las traviesas y los raíles sobre un suelo congelado. Como es obvio, hubo que
construir puentes y viaductos sobre abismos lo bastante largos como para cruzar
las vaguadas de grandes ríos y lo suficientemente altos como para que los vapores
pudieran pasar por debajo. Se tuvieron que arriesgar vidas trabajando a 100
metros o más por encima de cañones para construir puentes de madera. Hubo que
sortear desfiladeros y abrir caminos en la más intrincada foresta. Y los
trabajadores sudaron y murieron esculpiendo los salientes de roca para llevar
los raíles hasta la cima de los escarpados desfiladeros y para abrirse camino a
través de millas de dura roca.”
Fuente:
Breve Historia de la Conquista del
Oeste, Gregorio Doval, pág.299
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